Cómo la IA y el aprendizaje automático hacen que el cumplimiento sea más fácil de cumplir de manera consistente

El aprendizaje automático y la inteligencia artificial, más comúnmente llamada IA, se han hecho un hueco con respecto al cumplimiento normativo porque sus aplicaciones abordan problemas y desafíos sistemáticos comunes con los que muchos deben lidiar a diario. Pero, lo que es más importante, lo hace de la manera más eficaz y eficiente posible. Las aplicaciones de soluciones empresariales que integran IA, como el software de seguros SaaS, pueden mejorar de manera efectiva la eficacia y la eficiencia.
Algunas incluso pueden hacerlo con cumplimiento en varias industrias. Si bien el cielo es el límite con los avances tecnológicos que ofrecen la inteligencia artificial y el aprendizaje automático, muchas de sus aplicaciones actuales con respecto a los sistemas de cumplimiento demostraron tres ventajas: la reducción de falsos positivos, el tratamiento de errores y la minimización de costos. 1.
Reducción de falsos positivos. Muchos proveedores de servicios financieros han estado experimentando falsos positivos con sus sistemas de cumplimiento a un ritmo preocupantemente alto. Desafortunadamente, los sistemas de alerta de cumplimiento que se basan en tecnologías estándar actuales han activado miles de estos falsos positivos diariamente.
Dado que cada alarma debe revisarse cuidadosamente, invita a más errores humanos y oportunidades de ineficiencia. Afortunadamente, con ML e AI, este no tiene por qué ser el caso. El aprendizaje automático y la inteligencia artificial pueden capturar, analizar y filtrar cantidades masivas de datos y abordar los falsos positivos que desperdician el dinero y el tiempo de los proveedores.
Un buen ejemplo es que pueden mejorar significativamente el flujo de trabajo al categorizar cualquier elemento relacionado con el cumplimiento. actividad de forma autónoma y asegurando que las personas adecuadas sean notificadas con cualquier actualización, actividad y evento esencial. En otras palabras, pueden agilizar los sistemas de alerta de cumplimiento. 2.
Reducción de costes. Muchos proveedores de servicios financieros modernos se ven obligados a realizar cambios y ajustes para poder cumplir con los requisitos de cumplimiento normativo que giran en torno al análisis y la gestión de datos. Como resultado, los desarrolladores de RegTech ahora han comenzado a usar inteligencia artificial para mejorar la eficiencia y reducir los costos de cumplimiento mediante la automatización de procesos que, de otro modo, habrían requerido un tedioso trabajo manual.
Cuando se asocia con el aprendizaje automático, la inteligencia artificial puede automatizar el flujo de trabajo. Esto significa que se necesita menos capital humano y tiempo para respaldar sus operaciones de cumplimiento. Y cuando se usa junto con las ganancias de precisión que son posibles gracias a la integración de ambas tecnologías, puede ahorrar anualmente una cantidad considerable de recursos financieros en costos de cumplimiento.
3. Aborda los errores humanos. Ya sea debido a la falta de diligencia debida, procesos ineficaces o tecnología obsoleta, los gastos asociados con el error humano pueden costar mucho a las industrias reguladas cada año.
Por ejemplo, las regulaciones financieras que se aprobaron después de la recesión mundial requieren el seguimiento , gestión y análisis de datos detallados sobre transacciones, actividades operativas y clientes en instituciones financieras. El volumen masivo de información puede generar muchas oportunidades que podrían conducir a un costoso error humano. Al igual que usar calculadoras en lugar de cálculos manuales, ML e AI pueden arrojar algo de luz sobre ciertas áreas que, de otro modo, las personas se habrían perdido.
Además, pueden detectar patrones y tendencias para llegar a su base de clientes más fácilmente. Conclusión. Nadie puede negar los desafíos que surgen del cumplimiento normativo.
Si bien es cierto que no existe una solución que pueda satisfacer todas las necesidades, la inteligencia artificial y el aprendizaje automático pueden contribuir en gran medida a mejorar los sistemas de cumplimiento.